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José María de Juan

Fundador de Tourme

Desencuentros: Benito Pérez Galdós y Jacinto Benavente

La rivalidad entre ambos escritores surgió a partir de las diferencias en su estilo literario y su enfoque en la realidad social de la época. Aunque el desencuentro se intensificó con la elección de Benavente para ocupar el sillón "Q" de la Real Academia Española tras la muerte de Pérez Galdós, ambos escritores continuaron siendo importantes referentes de la literatura española de su época y dejaron un legado literario destacado.

Benito Pérez Galdós y Jacinto Benavente fueron dos de los escritores más importantes de la Generación del 98 en España. A pesar de que ambos se destacaron en géneros literarios diferentes, el teatro en el caso de Benavente y la novela en el de Pérez Galdós, los dos tuvieron un desencuentro literario que generó polémica en la época.

El desencuentro entre ambos se originó a partir de la publicación de la novela "Fortunata y Jacinta" de Pérez Galdós en 1886. La obra, que es considerada una de las mejores novelas españolas de todos los tiempos, cuenta la historia de dos mujeres de diferentes clases sociales y de la sociedad madrileña en el siglo XIX. La obra de Pérez Galdós destaca por su realismo y su análisis psicológico de los personajes, y es considerada como una crónica literaria de la época.

En contraposición, Benavente, que empezaba a destacar como autor teatral en la misma época, escribía obras que reflejaban la realidad de la época pero desde una perspectiva más superficial y centrada en el espectáculo. Algunos críticos literarios consideraron que la obra de Benavente no estaba a la altura de la de Pérez Galdós y que su estilo de escritura no tenía la profundidad y el realismo que caracterizaba la obra del novelista.

La rivalidad literaria entre los dos escritores llegó a su punto más alto en 1916, cuando Benavente fue elegido para ocupar el sillón "Q" de la Real Academia Española, que había dejado vacante el propio Pérez Galdós tras su muerte en 1920. Benavente se convirtió en miembro de la Academia con el apoyo de una parte del mundo literario, lo que generó una gran polémica entre los escritores españoles.

Pérez Galdós, que había sido uno de los fundadores de la Academia y había ocupado el sillón "Q" durante más de 20 años, había expresado en vida su deseo de que su sucesor fuera su amigo y colaborador, Emilia Pardo Bazán. La elección de Benavente fue interpretada como un desprecio hacia la memoria de Pérez Galdós y hacia los valores literarios que él representaba.

El desencuentro entre Pérez Galdós y Benavente se hizo público cuando el propio Pérez Galdós publicó un artículo en el que criticaba la elección de Benavente para la Academia y cuestionaba la calidad literaria de su obra. En respuesta, Benavente publicó una serie de artículos en los que defendía su obra y cuestionaba la de Pérez Galdós.

La polémica literaria entre los dos escritores se mantuvo durante años, y aunque Pérez Galdós nunca llegó a recuperar el sillón "Q" de la Academia, su legado literario y su importancia en la literatura española no se vieron afectados. Por su parte, Benavente continuó destacando como autor teatral y se convirtió en uno de los más influyentes de su generación.

Desencuentros: Benito Pérez Galdós y Jacinto Benavente